Odisea |
Un viaje interior |
Diez años despuésHe vuelto. Vaya por delante que no me gustan los blogs que hablan de sí mismos pero, al menos por esta vez creo que vale la pena hacerlo.Empecé Odisea en 2002 en una época agitada de búsqueda interior. Y dejé de hacerlo dos años más tarde sin saber decir muy bien por qué. Supongo que requería tiempo y motivación. Y nunca acabé de entender el valor que tenía. Creo que no la leía mucha gente, pocas veces tenía algunos comentarios y podría decirse que era una bitácora mediocre y gris sin un tema determinado. Diez años después he vuelto, buscando algo que escribí. Y mi sorpresa ha sido mayúscula por partida doble. En primer lugar porque Blogalia sigue existiendo y mi blog también. Pero lo más asombroso de todo es que siguen llegando comentarios a aquello que escribí hace tantos años, incluso alguien se pregunta si es que acaso no voy a escribir ya más. De todos estos posts que han seguido acumulando comentarios a través de los años destacan dos. El primero, publicado en Junio de 2002 tuvo dos comentarios entonces y en 2003 se añadieron otros dos. En 2006, dos años después del abandono del blog aparecieron tres nuevos comentarios, doce en 2007 y a partir de ahí siguieron llegando hasta hacer un total de ciento cuarenta y siete, él último de los cuales fue incorporado ¡hace una semana! Lo escribí un día que estaba triste y no tiene nada de particular, pero ha atraído a otras personas que estaban tristes que quisieron contra por qué, que se identificaron con mis sentimientos o encontraron algo de alivio en mis palabras. Increíble. Pero lo más impresionante se refiere a otro post que publiqué a raíz de un plagio de un poema de Neruda. Creo que la historia que voy a contar es realmente notable. Resumiendo diré que en 2002 recibí un mail con un poema atribuido a Pablo Neruda. Tras contrastar su falsedad, conté la historia en el blog. Lo malo, o bueno según se mire, es que critiqué duramente el estilo del autor del poema. Y resulta que el autor leyó mi artículo y escribió un comentario. Se identificó, explicó que el fue el primer sorprendido de que se atribuyera a Neruda e incluyó el poema original tal y como él lo había escrito, no sin antes hacerse eco de mi crítica. Dijo en su comentario: Aquí les envío la original Queda Prohibido con "la baja calidad del texto , la pobreza de vocabulario, la ausencia de lenguaje poético" (el entrecomillado es, evidentemente, lo que yo dije sobre su texto). Setenta y siete comentarios han aparecido a lo largo de los años, la mayor parte no para hablar de mi artículo sino para expresar lo mucho que les había gustado el poema. Nadie dijo que yo había sido injusto, arrogante y maleducado. Pero la vida, que da muchas vueltas, me demostró que lo había sido. Y lo hizo de una forma bastante sorprendente. Hace unos meses perdí a un ser muy querido para mi de una forma muy trágica. Y en los días posteriores al funeral un amigo me envió un mail diciendo “Tienes que ver este video”. Era el gran Ricardo Darín recitando un texto, un precioso poema que me hizo llorar como nunca y al mismo tiempo me llenó de consuelo. En las siguientes semanas vi el video muchas veces. Cada vez que lo hice me emocionó y me dió fuerzas. Lo envié a otras personas que estaban sufriendo como yo la pérdida de esa persona. No se si a ellos les ayudó pero a mi sí lo hizo. Y mucho. Entonces no me di cuenta. Pero el otro día, volviendo a mi blog y leyendo el post sobre el plagio a Neruda comprendi que el poema que recitaba Darín y el que yo había criticado con tanta suficiencia y pedantería eran el mismo. Yo había insultado y sin duda ofendido al autor. El no me lo reprochó, ni tampoco ninguno de los que comentaron mi artículo. Y diez años después esas palabras, en la voz de Darín, vinieron en mi auxilio. Alfredo Cuervo Barrero, te pido perdón por lo que dije y cómo lo dije. Te doy las gracias por haber escrito algo magnífico, unas palabras que me han llegado muy hondo aunque ya sea muy tarde. Algo que ha emocionado a mucha gente además de mi. Los comentarios de mi artículo son sólo una pequeña muestra. Ya ven, solo por una historia como esta, tenía que volver. No se si seguiré escribiendo, lo hago bastante peor que Alfredo. Mucho de lo que escribí me parece ahora irrelevante. Quizá continúe y resucite el blog, eliminando algunos artículos que no tienen mucho sentido o que son francamente malos y deje los más interesantes, que también los hay. Tal vez empiece un blog nuevo que tenga un objetivo o un tema y no sea tan ambiguo como Odisea. Quizá deje pasar otros diez años y no vuelva ya a escribir. No lo se. Hoy me quedaba una historia que contar y eso he hecho. 2013-05-19 a las 21:04 | Odiseo | 5 Comentarios | # Referencias (TrackBacks)URL de trackback de esta historia http://odisea.blogalia.com//trackbacks/73405
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